martes, 19 de diciembre de 2017

Dónde está Fog y dónde está Edge



Hace unas semanas hablé sobre qué es el Edge computing y porqué nos importa. Lo que pude sacar en claro es que todavía no existía un consenso sobre la diferencia entre ambos términos.

Dónde acaba y empieza el Edge, dónde acaba y empieza la Fog y si estos dos términos significan el fin de los días del Cloud Computing (como algunos han vaticinado).

Despues de tener el tema “en el frigorífico” ayer, por pura casualidad fui a dar con una imagen que me resultó completamente reveladora:




Efectivamente se puede ver donde acaba y empieza cada una de las diferentes capas que formarán las redes del futuro:

  • Edge, estará formado por billones de dispositivos, todos esos elementos que forman parte del IoT como los sensores, o electrodomésticos caseros o cualquier cosa conectada que se os pueda ocurrir, permanecerán es esa capa. Sus conexiones estarán centralizadas por elementos pequeños como un dispositivo móvil ordenadores, tablets o cualquier elemento con un poder de cómputo mayor que un pequeño sensor ( por poner un ejemplo). Recibirán los volúmenes de datos inmensos que generan con todas sus mediciones. 
  • Fog nos vamos ya a una capa de servidores con una capacidad de cómputo mayor, en el Edge ya se depurará un cierto nivel de información para que no viaje por la red los Teras de información que han generado todos esos pequeños elementos, ahora llegarán a servidores que ya tendrán la responsabilidad de revisar su contenido. Una segunda capa de revisión donde ya podemos poner elementos de seguridad y análisis ante posibles amenazas. 
  • Cloud. Aquí ya llegarán la información que sea realmente interesante para el negocio, llegarán sólo los elementos más importantes pudiendo: 
    • Ahorrar costes de transmisión y almacenamiento. 
    • Incluir una tercera capa de seguridad y detección a nivel más global pudiendo procesar amenazas que llegan desde diferentes fog’s. 
    • Tendrán la información solamente necesaria. 
    • Existirá un mayor nivel de seguridad ya que la seguridad en el Cloud es algo que ya es mucho más estable y está mucho más avanzada. 
Se puede ver con un simple golpe de vista que para IoT esto es el entorno ideal, por eso esta creciendo de su mano, pero abre las puertas a nuevos modelos de negocio e incluso plantear nuevos modelos de minería para criptomonedas con esquemas distintos al blockchain y la minería tal y como todos la conocemos, como por ejemplo IOTA.

Como podeis ver Edge y Fog no suponen el fin del Cloud sino que nacen para poder suplir las carencias de computación y tráfico de datos que podría suponer conectar esos billones de pequeñas cosas que están llegando, más que enemigos son buenos aliados.

Una imagen dice más que mil palabras.